Este domingo 17 de enero fue una fecha muy especial para toda la familia de Los Cardos, ya que el club festejó sus 50 años de vida. Lo hizo celebrando una misa a las 19 horas, en el club, para luego compartir un ágape con todos los socios y amigos que se acercaron a formar parte del festejo.

El sueño de un grupo de entusiastas amigos, que un 17 de enero de 1966 se reunieron en una mesa de café de la Confitería Norma, para transformar a ese equipo de rugby en algo más grande y a pensar en qué nombre ponerle, con qué color y símbolo identificarse, es hoy una realidad que a través de los años superó largamente aquella iniciativa que parecía utópica.

Los Cardos tuvo su primera sede, en una vieja casona ubicada en la calle 9 de julio 292, casa que pertenecía a la familia Usandizaga y que funcionó como el centro de reuniones de sus primeros socios entre 1966 y 1974, allí se realizaban los asados en donde se discutía el rumbo que iba a llevar el club y fue el lugar donde se hicieron las primeras fiestas, dando origen a la tan característica vida social que Los Cardos tiene y que con el paso de los años se convirtió en una tradición.

Los triunfos deportivos crearon la necesidad de contar con un lugar propio para entrenar y jugar, y luego de un tiempo de búsqueda se compra el actual terreno, ubicado en el Paraje Los Laureles.

En 1968 se forma el primer equipo de hockey del Club, que nace como una necesidad de las mujeres que en ese entonces no tenían la posibilidad de practicar ningún deporte en conjunto. Fueron Susana Díaz Delfino, María Cecilia Curuchet y María José Usandizaga quienes llevaron a que Los Cardos fuera uno de los precursores de ese deporte en Tandil fundando la Federación de Hockey Tandilense.